HISTORIA DE UN PLATANO

Como ya se imaginaran, soy una admiradora de David Montalvo, siempre expongo en este blog todo lo que he comprendido a traves de su lectura, de sus conferencias, de todo el material que expone pues considero que es una persona con una capacidad extraordinaria de llegar al corazon de las personas y de causar un efecto de felicidad, de bienestar y sobre todo de lucha por los ideales y por las cosas que nos satisfacen, ahora he leido esta historia que voy a mostrar a continuacion, porque deja mucho aprendizaje, espero que influya de manera positiva a tu vida. Como siempre un saludo mi gratitud eterna por estar aqui leyendo y un abrazo afectuoso.

Por. Elizandra

Después de 11 años trabajando como médico en uno de los países que hemos bautizado como ‘Tercer Mundo’, debí volver a mi casa por asuntos personales.

En una cena familiar, un pariente cercano me preguntó que para qué había estudiado Medicina si estaba malviviendo en una zona perdida de la selva. Sin siquiera darme tiempo a responder, justificaba socarronamente su duda afirmando que, para vivir así, mejor me hubiera hecho misionera y no habría tenido que ¿malgastar? los mejores años de mi juventud estudiando.

Lo realmente curioso es que casi todos los allí presentes le daban la razón haciéndome sentir un animal raro.

Quizá yo pensaría como ellos si me faltase la experiencia de estos años: muchos pacientes han llegado a ofrecerme un plátano como agradecimiento por haber ayudado en un parto o haber aliviado un dolor innecesario de una enfermedad incurable.

Un simple plátano, qué miseria para nuestros estómagos saciados, ¿verdad?. Lo que muchos no saben es que dos plátanos son la cena incluso la comida de un día completo de un matrimonio con tres niños. Sin embargo, en una acción de máxima gratitud (eso que a los occidentales nos falta) han reconocido mi modesto trabajo compartiendo conmigo lo máximo que tienen.

¿Puede un profesional sentir mayor satisfacción?

0 Comments:

Post a Comment



Publicar un comentario

  © NOME DO SEU BLOG

Design by Emporium Digital